Nuestro Centro es polivalente, cuenta con una oferta asistencial en Psicología, Logopedia, Rehabilitación logofoniátrica, Comunicación, Medicina Rehabilitadora, Enfermería.

La atención se dispensa al ámbito infantil, adolescente, adulto y tercera edad.

Centro concertado con Seguridad Social (SACyL) desde el año 1999 hasta el año 2017 para la rehabilitación logopédica.

Desde el mes de enero de 2010 existe un convenio-marco de colaboración con la Universidad de Valladolid para la realización de prácticas por parte de los alumnos de la Escuela de Logopedia de la Facultad de Medicina.

Centro inscrito en el Registro de Entidades, Servicios y Centros de carácter social de Castilla y León. Servicio de promoción de la autonomía personal: Estimulación cognitiva.

Desde enero del año 2017 forma parte del Comité Evaluador de la Comisión Permanente de Formación Continuada de las Profesiones Sanitarias de Castilla y León. Área de Logopedia.

El modelo psicoterapéutico principal  desarrollado en el Centro es el cognitivo-conductual. Este modelo se caracteriza o define como una psicoterapia a corto plazo, activa, directiva, estructurada, dinámica, psicoeducacional y colaboradora.

El principal centro de interés del modelo cognitivo-conductual consiste en ayudar al paciente a explorar el modo en el que construye, representa y entiende el mundo (cogniciones) y a experimentar con nuevas formas de respuesta (conductuales) que emocionalmente le proporcionen una mayor autopercepción real de bienestar.

Se plantea como  objetivo principal el incremento de las destrezas del paciente para que se pueda manejar con más efectividad ante las exigencias de la vida y por lo tanto tenga un mayor sensación de control y autoeficiencia.

Proceso en el Tratamiento

Para confirmar o descartar que el niño, el adolescente o el adulto tenga algún problema hay que llevar a cabo un DIAGNÓSTICO, que se define y fundamenta en la primera consulta.

Dicha consulta no es gratuita.

Para ello se realiza, tras la primera consulta, una EVALUACIÓN mediante:

. Diferentes entrevistas con los padres, con el niño-a o adolescente, con los profesores u otras personas relevantes para la evaluación (en el caso de un-a menor de edad);  o con el adulto.

. Diversos test y pruebas pertinentes para cada casuística personal.

. Una detallada observación conductual y emocional plasmando un análisis funcional.

Una vez finalizada esta valoración se concluye el diagnóstico.

Con el diagnóstico se realiza un programa de intervención ÚNICO Y PERSONALIZADO tanto en tipo y estrategias de intervención, periodicidad, duración aproximada, horarios, seguimientos posteriores, etc.

Si fuera necesaria, se plantea una ATENCIÓN INTEGRAL de cada caso.